El fenómeno del internet tiene relativamente poco tiempo, se dice que en 1983 surgió la base de la red actual, 38 años después, tenemos en nuestras vidas uno de los canales de comunicación más importantes, que nos permite mantenernos comunicados, realizar nuestro trabajo a distancia y hasta comprar cualquier cosa que se te ocurra.
Este crecimiento dió paso a que el comercio electrónico y las marcas comenzaran a ver el potencial de internet para la compra en línea, pues una de las ventajas es que no hay limitantes de espacio geográfico y se puede vender prácticamente en cualquier parte del mundo, así como el uso de datos que da el internet.
Toda esta forma de vender es completamente distinta a la normal, pues no hay un local, los consumidores no pueden tener contacto físico con el producto y por lo tanto la forma de convencimiento es a través de contenido, imágenes, testimonios, descripciones y hasta promociones especiales.
Sin embargo el comercio electrónico no solo sucede a través de una página web, también sucede en otros canales fuera de la marca, como son las redes sociales, las plataformas de video, así como entre la misma comunidad que se genera en tu marca.
Cada vez vemos más que las marcas utilizan las distintas plataformas de redes sociales que existen, con la intención de posicionar sus productos y dirigir más tráfico a sus sitios web. Sin embargo, aún más que esto, ahora incluso existe la posibilidad de utilizar esas plataformas para vender directamente en ellas.
Instagram es una aplicación que se centraba en compartir fotos y conectar con personas a través de ella, pero las marcas vieron su potencial, pues cada día tuvo más protagonismo entre los usuarios y la plataforma vió que era una oportunidad para ayudar a los comercios a vender de una forma más sencilla.
De hecho, tiene poco tiempo que implementó la opción para realizar compras dentro de la plataforma, aunque no puedes comprar por completo el producto, pues te manda a la página web de compra o que se haga a través de ligas de pago para realizar el pago por internet.
Las historias de Instagram son una función rápida, en la que podemos seguir el día a día de nuestros amigos, familiares, noticias de marcas, influencers o cualquier otra persona a la que sigamos. Sin embargo, más que antes nos encontramos con una historia patrocinada en lo que parece una de cada dos historias.
La implementación del video para vender
La creación de contenidos en video es cada vez más común, en distintas plataformas se encuentran los conocidos “unboxing”, recomendaciones o reviews de productos, muchos de ellos pagados y otros más simplemente para crear contenidos de canales dedicados a mostrar distintos productos.
En YouTube, además de los videos que podemos encontrar, existe la publicidad que sale antes, durante y después de un video. Además, si las marcas hacen contenidos en este formato, utilizan la caja de descripción para colocar enlaces, así como links para vender el producto en distintas plataformas.
Sin embargo, ahora también existe TikTok para vender con video. En esta red usualmente es fácil ofrecer productos o servicios a través de embajadores, influencers o simplemente al estar presente en vídeos, de una forma u otra, es suficiente para conseguir una publicidad significativa. Si un gran «TikToker» utiliza una camiseta de la «marca A» es suficiente para atraer tráfico a su sitio web o conseguir ventas de esa pieza concreta.
Cómo ves, las redes sociales han evolucionado y ahora, son también una oportunidad para vender, incrementar tus interacciones con personas y posicionar tu marca.
